Descripción
En el Rheinhessen los suelos son sedimentarios y diversos, principalmente de marga caliza, loess y areniscas, y el clima es más temperado que el de sus vecinas regiones del norte. Un clima menos frío propiciado por su latitud y por la proliferación de colinas y bosques protectores, por eso en esta región alemana es posible un cultivo de muchas otras cepas a parte de la Riesling, variedades como Sylvaner, Müller-Thurgau, Pinot Gris y Pinot Blanc para las blancas y las tintas Dornfelder, Portugieser y Kerner. De hecho, muchos de los nuevos cruces de cepas aromáticas ya muy difundidas fueron creadas aquí por el profesor Georg Scheu, como la uva Scheurebe.
Es una zona con una larga historia vitivinícola pero en los últimos años ha estado algo menospreciada en comparación a otras regiones vinícolas alemanas más establecidas y renombradas como Rheingau y Mosel. Por suerte, actualmente este panorama está cambiando rápidamente con la aparición de jóvenes enólogos que están redefiniendo la esencia de los vinos del Rheinhessen, viñateros energéticos como Martin que, pese a su juventud y a su escasa experiencia en la elaboración, ofrecen una nueva visión de lo que son los vinos artesanales haciéndolos con mucho trabajo y dedicación a partir de fruta procedente de viñedos sanos y vivos cultivados con una filosofía regeneradora. Son vinos heterogéneos, experimentales, muchos, mezcla de variedades, vinos libres, pero siempre de gran calidad y capaces de transmitir el territorio. Los vinos de Martin, nuevos en el mercado, son una sorpresa muy grata ya que están llenos de calidad. Se regalan en textura y jugosidad, son crujientes y frescos pero se muestran a la vez profundos y con dimensión. Vinos puros y auténticos, muy aromáticos y con una acidez aguda y tensa que les aporta salud y consistencia.
